En su intervención en el debate por el Presupuesto 2021, la diputada nacional del Partido por la Justicia Social de Tucumán Beatriz Ávila consideró que “hay un trato totalmente discrecional” en la confección de la ley de leyes, y criticó la falta de un sendero de crecimiento claro.
“El presupuesto es la hoja de ruta de un gobierno, es la ley de leyes. Hoy debemos atender la crisis económica, de hace muchos años atrás, y debemos agregar esta pandemia que nos tomó de sorpresa en el mundo entero. Este cuadro de fragilidad macroeconómica impacto en toda la sociedad. Sin lugar a duda provocó mayor pobreza, mayor desempleo, empeoramiento de la situación social, empresas cerradas, sectores productivos paralizados, y en los últimos meses una corrida cambiara, que obviamente se debe a la falta de confianza”, comenzó en su alocución la legisladora tucumana.
Frente a esta situación, Ávila consideró que en el presupuesto que perfiló el Gobierno “no establece pautas monetarias, fiscales o cambiarias claras. La economía se maneja por expectativas. Las proyecciones indican que la caída será de un 12% aproximadamente, acompañado de un abultado déficit fiscal entre el 8 y el 10% del PBI, una inflación elevada, una aguda recesión; y se espera una recuperación económica en la medida de que la situación sanitaria vaya mejorando día a día”.
“Por eso cuando observamos este presupuesto, a mi modo de entender, es solamente voluntarista: no es real, no se encuadra dentro de un programa económico. Esto ya lo dijo el presidente, a él no le gusta, y no cree en los programas económicos”, analizó la legisladora.
En este sentido, sostuvo que, a lo que tenemos que apuntar hoy, “es en volver a generar la confianza. Y para esto sería bueno que se dijera claramente, cómo vamos a reducir la inflación, cómo se va a evitar seguir emitiendo moneda para el desequilibrio fiscal, cómo se va a recuperar la inversión para generar fuentes de trabajo, y sobre todo cómo se va a reducir el gasto político. Y estas respuestas no viene solamente de un equipo económico, tiene que venir del sector político, es la respuesta que los argentinos están esperando”.
Respecto a la perspectiva federalista del presupuesto, Ávila sostuvo que “se ve poco y nada, sigue ausente. Federalismo es promover el verdadero desarrollo social en todo el país. Es cierto, hay obras públicas, hay temáticas que están insertas, pero no abarca todas las provincias. Y manejar un país con un sistema de premios y castigos, es una práctica totalmente repudiable, y más en este contexto”.
“De acuerdo con la distribución que vi de este presupuesto, lo que puedo deducir es que hay provincias de primera, segunda, tercera, y cuarta categoría; y ni que hablar de los municipios a lo largo y ancho de todo el país. En el interior, los efectos de la crisis son devastadores”, agregó.
Y respecto a la situación de su provincia, Tucumán, sostuvo que “no está en ese lote de provincias privilegiadas. Hoy creo que, lamentablemente, hay un trato totalmente discrecional en la búsqueda de conseguir la aprobación de este presupuesto, dejando de lado lo que significa el bienestar de la comunidad y de todos los argentinos”.
Finalmente, concluyó: “Este proyecto supone que, si ceden los efectos de la pandemia, la economía podría tener un rebote del 6%. Esto es que recupera solo una parte de la caída. Sin sendero de crecimiento en el presupuesto, se carece de un verdadero sentido; y si no sabemos el rumbo, este presupuesto pasa a ser un instrumento poco útil”.
Fuente: Parlamentario.com